Me levanté como siempre, la rutina de siempre, la ropa de siempre, porque el siempre es sinónimo de rutina de monotonía.
Caminé como siempre pero todo era diferente, las calles, los árboles, las miradas, los lugares.
Era como si nunca pudiera llegar a destino como un camino interminable.
Llegué a la conclusión, no es que todo sea diferente, yo estoy cambiada.
Después de 30 cuadras me dí cuenta que todo era diferente porque me había levantado dormida y me fui caminando en dirección contraria.
odio mis conclusiones tan erradas.
1 comentario:
boludaaaaaaa no puedo dejar de reirme....nose si el objetivo de esto sea la risa pero bueno provoca eso en mi...sino era el objetivo ponete contenta porque ocasionaste una sensacion nueva en un lector!!!!
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